La presentación falsa de dos bebés …¿Cual es la diferencia? Es la forma de su muerte. ¡Uno de ellos estaba envuelto en agua salada y se quedó dormido, mientras que el otra estaba durmiendo dentro del útero materno y se le inyectó suero salino para matarlo y quemarlo vivo! ¡Es que uno de ellos es fotografiado por el mundo, mientras que el otro fue un objeto con los despojos y desechos humanos, en una fotografía que nadie quiere ver! ¡Uno de ellas está vestido y el otro no!, archbishopcranmer.com
Escuela de Rescatadores 
Mala noticia para la lucha provida en España.
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=24833
Los provida españoles sois unos : y esta es la «imagen» que nadie quiere reconocer. Y, por consiguiente, resolver. Esta lucha no es un juego y, sin objetivos, perdonen ustedes, no hay resultados. Y, para mayor afrenta, nos justificamos. A mi me puede valer porque soy cristiano con un lema claro: «de derrota en derrota hasta la victoria final». El problema angustioso es que a las víctimas del terrorismo del aborto, eso, no les vale.
Soy una rescatadora Juan Pablo II. Me juego la vida todas las semanas. Nadie va a amilanarme. Estamos para salvar bebés. Ni usted, ni el personal de los abortorios, ni los políticos proaborto, nadie.
No es mi intención que se amilane, antes al contrario: incremente su labor. La noticia hace referencia a un fracaso espiritual. No somos capaces ni de mantener grupos de oración. Porque si usted es rescatadora, como presume y no lo dudo, sabrá que, si no rezamos, no rescatamos. Es lo primero que debe aprender un rescatador. Pero mi crítica no cae sobre los héroes que hacen su tarea a pie de calle, va un poco más arriba. Hasta el papa Francisco ha hecho caricatura de esa actitud de «mierdecillas»: «obsesivos y obsesionados». Y aunque esto tiene un mayor trasfondo le animo a que persista en los rescates, como bien dice, ante todos. Por cierto, el que se juega la vida no es el rescatador, es el niño en peligro de aborto. Enhorabuena.
Gracias Miriam. Estamos cansados de la gente que insulta sin hacer nada. Y me pregunto: dán dinero a los que ayudamos a las madres que se rescatandel aborto (muchas de nuestros sueldos), o se implican en primera fila con rescates como los rescatadores Juan Pablo II (solo ese nombre ya denota lo valientes que son) porque se juegan su vida. Si su vida (aparte del bebé).
No se los de 40 DVida. No lo conozco.
Pararrollos, menos opinar de lo que no se conoce y más hacer.
Pararrollos:
Es verdad, muchos somos unas mierdecillas perezosas con complejos. También hay mierdecillas obsesivos y obsesionados con la primacía de la estabilidad correspondiente al dinero, salario, pagas, empleo estable, sanidad asegurada, sueños y proyectos egocéntricos y, si se tercia, con la primacía de ciertas experiencias afectivosexuales. Algunos quieren que reces por ellos obsesivamente pero no admiten en sus catálogos oficiales a los parias «olvidados» por el parte mediático global; otros incluso ya obvian pasajes «non gratos» del evangelio. Ojos que no ven, corazón que no siente. El que sabe de una matanza reiterada en la calle de al lado y no tiene muy bloqueada su conciencia tiene que sufrir por ello y alegrarse por los rescates consumados de personas estupendas como MíriamT. Desde luego, yo la voy a defender a capa y espada siempre.
Es muy difícil mantener grupos de oración donde las víctimas del aborto son tratadas como algo a medio camino entre un perro y un trapo por los poderosos de todas las instituciones. Ahora entiendo lo de que «hay que cambiar los plazos por los supuestos», claro: si te da igual un mes que nueve, pues venga con el aborto libre (sin poner la palabra «derecho») a través del inanalizable problema psíquico de la mamá (que puede ser el de la abuela), las píldoras abortivas (derecho a abortar conservador), pero sin plazos porque somos defensores de la vida como idea. El sistema es tan robusto que incluso sorprende a los abortistas, no siendo imposible que una ley más progre, dentro del mismo desastre, mejore o no empeore la situación anterior, sin que se enteren ni ellos y a pesar de ellos.
Tienes razón en que para rescatar hay que orar pero, rodeados de «lobos» acomodados por todas partes, los grupos orantes libres escasean.
Por cierto, yo en mi época de rescatador estuve a punto de ser agredido por «novios» varias veces, y otros rescatadores han sufrido agresiones. Por supuesto que nosotros no estamos expuestos al mismo riesgo vital que los parias de los parias, pero el riesgo de muerte social es elevado para los que se atreven a salirse del redil. Nada nuevo en una tiranía.
En cambio, MíriamT forma parte de un milagro por el que tenemos que seguir rezando. Como bien dices, enhorabuena.
Y gracias, amigos.
Miriam, reitero mi enhorabuena y gratitud. Siga con su labor y, por favor, no se deje morder por la soberbia, es un perro rabioso nada recomendable.