María Mayela Banks, de Lampazas (Texas) acudió con este cartel a las puertas del capitolío, EEUU. “Me arrepiento de mi aborto”. Banks relató cómo a los 21 años tomó la decisión de abortar y 30 años después sus ojos aún se llenan de lágrimas cuando asegura que “no sabía que estaba cometiendo un crimen», matar a mi propio hijo. “Yo había ido allí (Planned Parenthood) por pastillas para planificación familiar, pero cuando las pastillas fallaron fui a que me dijeran qué opción había para interrumpir el embarazo, pero no me explicaron, me dieron medicamentos que me durmieron y cuando me di cuenta lo que estaban haciendo adentro de mi cuerpo quería gritar que pararan pero no sé si me escuchaban porque mi cuerpo estaba dormido aunque mi mente no”. “Fue la única oportunidad que tuve de dar vida y mi cuerpo me lo reclamó, porque después del aborto comencé a producir leche y eso es porque cuando matamos a al bebé que llevamos dentro nuestra mente no sabe qué hacer con esa verdad”.
Me eché para atrás, pero no podía hablar
Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el enlace permanente.