El otro día volví a rescates. Hacía mucho que no iba, recordaba que eran duras las conversaciones que tenía con las madres que iban a abortar, o las parejas de las madres que no tenían sensibilidad. Pero esto fue demasiado.
Vimos a una pareja salir del abortorio, y fuimos a hablar con ellos. Marta me dijo que hablara con el chico, mientras ella se quedaba hablando con la madre. Así hice. Ella se estaba pensando si abortar o no. Yo hablaba con él para que me contara su situación. Tenía 19 años, dos menos que yo, y decía que había tomado una decisión que no iba a cambiar. Me comentaba lo difícil que era tener un hijo a esa edad, y que no podría mantenerlo. Le dije que sería difícil, pero ninguna comodidad valdría lo que vale su hijo. Convencido, me dijo que no era la primera vez que lo hacía. Ya había acompañado antes a otra novia para que abortara. Cuando le pregunté si no caía sobre su conciencia, me dijo que no. «Además, si tuviéramos a este niño, no podría salir los sábados a fumar y beber con mis amigos» Añadía.
Yo, perplejo, le dije:
«Entonces, ¿ vas a renunciar a tu hijo por fumar y beber con tus amigos los sábados?»
«Sí.» Me contestó
Yo no daba crédito, así que insistí con más crudeza: «¿Me estás diciendo que vas a *matar a tu hijo* por fumar y beber los sábados con tus amigos? » Esas fueron las palabras que utilicé: matar a tu hijo. Pero su respuesta no cambió. «Sí, así es» Volvió a decir con serenidad. Me quedé rendido. No sabía qué decir.
Hoy me acabo de enterar de que la chica abortó. El novio llamó a Marta insultándola. «Nadie le va a decir si quiere o no que su hijo viva«. La chica lo ha hecho porque sino su novio le dejaba. Y así multitud de novios y parejas aparentan querer a sus mujeres llevándolas al abortorio para quitarse un «peso» de encima. Jacobo Vazquez, Rescatador Juan Pablo II
A Jacobo: disto mucho de ser antiabortista, pero he querido mandarte un mensaje.
Mejor que ese niñato no haya sido padre.
Esperemos que no vaya por tercera vez a acompañar a abortar a otra chica porque a este paso le van a dar tarjeta vip por ser buen cliente.
El bebé no debe pagar con su vida que su padre sea un niñato. Si por esa regla fuera, no merecerían vivir tantas personas que tienen padres que no les merecen. Desgraciadamente las asociaciones feministas no creo que se hagan eco de esta noticia.