Este sábado se han bautizado 11 niños de la asociación +Futuro. Lo preside el obispo de Getafe, D. Joaquín López de Andújar en la parroquia Inmaculada Concepción de Alcorcón. Lleva bautizados 60 niños en 4 años. Todo un record que tiene su premio. Cada niño tiene una historia, cada una distinta, que podía no haber llegado a término. Algunas de ellas nos han dejado su testimonio. Como nos dice Mirella, “yo quiero ayudaros, como me ayudasteis a mí, quiero que la gente sepa que tu hijo siempre te va a hacer feliz, vaya como te vaya la vida, pero abortarlo nunca”.
Mirella llegó a la asociación +Futuro un 29 de septiembre de 2014. Hoy bautiza a su hijo. Pero Eduardo no iba a nacer. Álvaro, Gonzalo y Covadonga llevaban horas en la cercanía de un abortorio de Madrid. Habían salido de clase esperanzados con salvar algún bebé. Pero no paraba de llover. Estaban desesperados. Se refugiaron en un portal cercano al abortorio. Así era imposible que pudieran dar ninguna información a las mujeres para no abortar. Pensaron que lo mejor era volverse a casa. Pero se cruzó una pareja. Tenían cita para pedir información para abortar. Empezaron a hablar con ellos. De repente una señora que pasaba por ahí empezó a gritar a los rescatadores, insultando, “¡Largaros, chica mejor aborta, que estos no te van a ayudar!”. Decidieron irse a un bar cercano. Invitaron a Mirella y su pareja a un café. Hablaron mucho tiempo con Mirella, también con su novio. Estaban muy asustados. Al cabo de mucho tiempo decidieron no entrar en el abortorio.
Al día siguiente Mirella vino con su madre a la asociación +Futuro, estaban muy indecisas. Al final de la tarde éramos muchos con Mirella, los tres rescatadores vinieron también. El ambiente era alegre, la confianza de que ese bebé iba a tener una oportunidad de vivir nos hacía estar felices. Ya de madrugada Mirella me mandó un mensaje. Son esas noticias que te hacen seguir ahí, salvando bebés. Unos meses después Mirella emprendió un viaje junto a su novio para probar un cambio profesional en el otro lado del charco. Durante un año ha estado comunicándose con nosotros en la distancia. Nos contaba sus problemas, sus fracasos profesionales pero siempre feliz con su hijo. Durante ese año, Álvaro terminó derecho y los otros dos rescatadores enfermería. Ahora Álvaro ha empezado una carrera apasionante, ha entrado en el seminario para ser sacerdote. Hemos perdido a uno de los mejores rescatadores Juan Pablo II, pero sabemos que tenemos más enchufe ahora con el de Arriba. Mirella siempre es muy agradecida, ha adquirido carácter, seguridad en sí misma y sobre todo ha crecido por dentro. Hoy dos años y medio después, Eduardo entra en la casa de Dios.
Lucía tenía ya otros hijos muy seguidos. Cuando los rescatadores Juan Pablo II se cruzaron en su camino al abortorio, los escuchó pero entró. Una de las rescatadoras, Rocío, la dio por perdida. Pero al poco tiempo salió, se acercó a ellos y les dio su teléfono. Vino +Futuro en seguida. No para de enviarnos amigas para que las convenzamos de que no aborten. ¡Estamos pensado ponerle una asociación solo para ellas!. Ahora bautiza a su hija. No falta a ninguna convocatoria. La vida le ha regalado a su hija, que aunque le ha dado problemas de salud es a la que más mima. La niña siempre está sonriendo.
Loren no quería más hijos. Estaba en una situación personal y social muy difícil. Nada le iba bien. Pero en la puerta del abortorio nos escuchó. Tuvimos que hablarla en inglés. Puso muchas pegas, pero un día llamó ella y se presentó con una maravillosa niña de 5 años. Desde entonces no hay semana que no la tengamos ahí. Un día miró el almacén de ropa perfectamente ordenado y nos dijo: “¿esto es para nosotras? ¡Pero si no le importo a nadie!”. Y desde ese día es la mimada de la asociación pese a que algunos voluntarios no dominan el inglés. Su hija es una más en +Futuro. Hoy Loren está feliz. Y nosotros también. Marta Velarde Mayol, +Futuro-Rescatadores Juan Pablo II